Entrevista Luciano D`Alessandro
Diario (6to Poder)
29 mayo 2012
Su cara de niño bueno y
sonrisa casi perfecta hace que nos creamos cualquier papel, sin embargo no hay
que olvidar que su talento y constancia también lo han llevado a ser
protagonista en nuestros corazones. Se nos fue un tiempo más allá de la
frontera buscando otros caminos, pero tal parece que no hay una producción
nacional que no cuente con su presencia, así que debió dejar su búsqueda y su
compartir con la media naranja para convertirse en Alonso Prada y promocionar
la película que con orgullo nos invita a no dejar de ver.
Luciano, estás lleno de iniciativas y
estrenos. Participas en la nueva película venezolana “Memorias de un soldado”,
recomiéndanos no perdérnosla y cuéntanos por qué.
Bueno, en la pantalla grande es mi primera vez, es
la ópera prima de Caipolicán Ovalles. No se la pueden perder porque es una
historia de amor durante tiempos de guerra, pero está contada desde la
perspectiva de un soldado común y corriente, de un héroe anónimo, no hay
susceptibilidades con ningún prócer, que si bien aparecen en la película están
en segundo plano. Contar una historia de amor desde los tiempos de la
independencia me parece súper chévere, y muy modestamente creo que el trabajo
que hice es bien bonito, al ver la película quedé bastante satisfecho. Otra
buena razón para ver la película es la posibilidad de apoyar el cine nacional.
Nuestra guerra de independencia fue una de las más sangrientas en
Latinoamérica, pero se maneja de un punto de vista tan bonito que no se la
pueden perder. Van a salir muy complacidos de la película porque está muy bien realizada.
La novela ha tenido un despliegue
publicitario increíble ¿Qué nos mantendrá sentados puntualmente frente al
televisor cada noche?
Pues tengo que decir que esa novela viene con todo,
es muy chévere muy simpática esa mezcla de suspenso con la comedia es muy
arriesgada porque generalmente son géneros que se ofrecen por separado, pero
sin embargo aquí se unen, se entrelazan y se respetan al mismo tiempo de una
manera fabulosa. Tiene unas estupendas actuaciones. Por mi parte verán a
un protagonista bastante atípico, que tiene sus malos momentos, que maneja muy
bien el sarcasmo, es un buen tipo pero es una persona corriente que tiene sus
momentos malos y momentos buenos, y eso me parece fabuloso. Está muy bien
escrita y cuenta con un elenco de primera.
Un secretito que nos puedas develar.
No pudiera decir más nada, todas son sorpresas, ya
vieron que en el primer capítulo murieron dos personas (risas).
Martin Hahn suele jugar con las
personalidades de los personajes. ¿Alonso Prada es bueno bueno, o bueno medio
malo?
Bueno, él es bueno, aunque no es el típico
protagonista bonachón sino que sufre y padece, puede salir con cosas fuertes,
cosas que de repente un protagonista típico no haría, a veces maneja el
lenguaje con sarcasmo, provocativo. Lo que me gusta de él es que es un tipo
bueno, que cree en la familia, adora a su hijo, pero bueno… se le revuelve todo
cuando aparece su ex (risas), no sabemos qué le tenga Martin preparado a
Alonso, pero por ahora es tal y como lo ven.
Es probable que te hayan preguntado mucho si
tu ex te tiene ganas, sin embargo yo más bien quiero saber si tú le tienes
ganas a alguna ex.
Sí, sí me ha pasado, ¿por qué negarlo? (risas).
Martin Hahn ha afirmado que esta será la
reivindicación de “La viuda joven”, ¿no temes que esta “reivindicación”
fracase?
A veces no se pueden complacer todos los gustos. La
viuda joven, sin duda, fue un exitazo increíble en Venezuela y en el exterior.
Las críticas que escuché fueron sobre el capítulo final, porque mucha gente
quiso que fuera otro. A mí me pareció genial que quedara el final abierto, pero
bueno, la mayoría de la gente quiso un final más cerradito. Yo no creo que esta
novela sea una especie de justificación porque, en teoría, puede ser que venga
una segunda parte de “La viuda joven” el año que viene, eso se está comentando
en los pasillos (risas). Esta novela es más refrescante, dicho por el propio
Martin. A pesar de que maneja el suspenso, es totalmente diferente, pero
siempre con el sello de Martin. Esta es mucho más coloquial, más de la calle, a
pesar de que por exigencias del canal nos piden hablar bien, pronunciar bien
las palabras, las d y las j que normalmente los venezolanos nos comemos
(risas), por una cuestión de mercadeo para poder ubicarla luego en un escenario
internacional.
Entre tanto primer actor y personaje
internacional ¿no hay una colisión de egos en el elenco?
No, para nada. Ahora me agarras en hora de almuerzo
y estaba sentado con Lilibeth Morillo, con Carlos Montilla, con Winston
Vallenilla, Amanda Gutiérrez y Rolando Padilla comiendo y echando chistes y es
precisamente esa la actitud que hemos tenido desde el primer día de grabación,
esperamos que se mantenga hasta el último día así. A pesar de que son primeras
figuras y muy reconocidas, el ambiente es estupendo.
Tienes ya un rato en los pasillos y estudios
de Venevisión. Pero ¿sueñas con volver a un RCTV recargado?
-Estoy ligando que RCTV vuelva en algún momento, y
sin duda trabajaría allí de nuevo con los ojos cerrados. Imagínate, fue mi casa
por seis años y medio, fue mi escuela y la escuela de muchos en todas las
carreras. La competencia es algo que nos conviene a todos, incluso hasta el
propio Venevisión.
Estabas viviendo en Bogotá. ¿Qué proyecto
abandonaste allá cuando decidiste aceptar este papel?
Sí, estaba en Bogotá desde que se terminó “La viuda
joven” porque mi novia vive allá, y estuve haciendo una serie de castings en el
último trimestre del año pasado, pero justo en noviembre-diciembre empezaron
las conversaciones para devolverme a Venezuela. Cuando me hablaron del proyecto
y me enteré de cómo era y de qué iba, la sinopsis de la historia me encantó y
dije “sí” de una vez, con los ojos cerrados regresaba a Venezuela. No estaba
haciendo nada específico solo participé en la última tanda de castings allí en
Colombia.
Espero que después de la presentación de “Memorias
de un soldado” salgan propuestas de cine, porque me he quedado ya con ese
saborcito de hacer cine y sería genial hacer otra cosa distinta. Esta fue de
época, y me gustaría también hacer algo más actual. Yo, encantadísimo.
Eres bien activo en Twitter, tanto que hace
poco hiciste un Twitcam algo accidentado ¿Cuándo harás otro? Digo, para
anunciarlo de una vez.
Bueno, vamos a ver (risas), lo que pasa es que la
última vez que lo hice tuve algunos problemas técnicos. La señal se iba, me
escuchaba pero no me veía. Ya había hecho otros antes y me había ido súper
bien, pero este último fue un poco “truculento” (risas). Yo creo que en menos
de un mes haré otro para medir qué tal la novela, y qué tal la película, quiero
tener ese feedback con la gente.
¿Qué oferta no aceptarías nunca y qué papel
te mueres por interpretar?
Yo creo que hoy por hoy no me niego a nada. Uno,
como actor, siempre busca retos y hacer cosas diferentes, por eso no pienso
“oye, si me ofrecen esto yo diría que no”. Y me encantaría hacer una película
de comedia bien escrita. Las obras de teatro que he hecho han sido de comedia.
No sé qué personaje, pero sí que sea de comedia.
¿Qué te ha traído de malo tu cara niño bueno?
En televisión uno generalmente se encasilla y trata
de salir de eso tomando papeles distintos, porque de ser siempre el niño bueno
la gente también se aburre. Luego del villano que hice, salió esta
protagonización de niño bueno que he podido matizar con otras cosas.
Generalmente, en la televisión es muy difícil variar, te ven para cierto tipo
de personajes. En cambio en el teatro tienes el poder de escoger el proyecto y
hacerlo más por gusto que por otra cosa, cada vez que me monto en una obra,
gracias a Dios, ha sido comedia. Por ahí se está conversando sobre una comedia
en teatro, y aún está crudo, pero ustedes van a ser los primeros en enterarse.
La percepción más errada que pudiéramos tener de
ti.
Que soy un divo intratable (risas). Pudiera ser
eso.
Y el amor de Luciano ¿cómo está? ¿Hay planes
de una boda sensacional?
Mi pareja es la actriz venezolana Zair Montes.
Tenemos ya más de tres años de relación y una buena parte de esos años ha sido
a distancia, pero hasta ahora hemos superado esas cosas, la vamos llevando
bien, con calmita. Por ahora no hay apuro en el sentido de casarnos y tener
hijos pero mientras sintamos lo que sentimos pues eso va pa’lante.
¿Cuál es la pregunta más incómoda que te han hecho?
De qué tamaño lo tengo (risas)… Mal pensadaaaa… el
egoooo…
Agradecemos la entrevista a Luciano y le deseamos
mucha suerte en todo lo que desee emprender. Desde aquí estaremos pendientes de
todas las buenas nuevas. Síganlo en su cuenta Twitter @Lucianoda
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